Para terminar nuestra travesía, hablaremos de las glándulas anejas de nuestro aparato digestivo. Las glándulas salivales y el páncreas exocrino van a producir secreciones muy importantes y que nos van a ayudar a digerir correctamente o deglutir nuestros alimentos favoritos.

Párrafo Nuestra máquina de desintoxicación y nuestro órgano favorito cuando salimos de fiesta. Se va a encargar de regular nuestro metabolismo y nuestras reservas de nutrientes, además de filtrar nuestra sangre. Producirá la bilis, crucial para la correcta absorción de grasas a nivel intestinal.

Proseguimos con un largo tubo muscular que desemboca en el gran saco que es el estómago. Hablaremos de las glándulas productoras de ácido y pepsina, cruciales para que se lleve a cabo un porcentaje importante de la digestión, sobre todo la de las proteínas.

Nuestros intestinos, que alcanzan una longitud asombrosa, nos van a servir para absorber los nutrientes. Se trata de órganos tubulares que contienen vellosidades, capaces de extender su superficie hasta el nivel microscópico. A continuación, se analizan las especializaciones de la mucosa intestinal para llevar a cabo esta función tan importante; además de ver algún que otro elemento que nos permita distinguir la porción en la que nos encontramos.